
franquicias opticalia
Opticalia ha alcanzado presencia en más de 50 municipios con franquicias de ópticas tras una década de operaciones en Colombia.
Su gerente general, Germán Venegas, analiza los retos que enfrenta el sector óptico, así como las oportunidades que surgen ante la nueva coyuntura económica y del sistema de salud.
¿Cuál ha sido el principal aprendizaje en estos diez años de presencia de Opticalia en Colombia?
Han sido diez años llenos de experiencias y crecimiento. Iniciamos de forma modesta y hoy contamos con una marca que agrupa a numerosos aliados en distintas regiones del país. Actualmente poseemos la red de ópticas con mayor cobertura nacional, con 152 franquicias de ópticas que se extienden desde La Guajira hasta Leticia, y desde Quibdó hasta Puerto Carreño. Atendemos pacientes en prácticamente todas las zonas del territorio colombiano.
¿Cómo están distribuidos esas franquicias a lo largo del país?
Hoy estamos presentes en 52 municipios, con operaciones en casi todos los departamentos. Sin embargo, no somos ajenos a la realidad nacional: en algunas zonas hemos tenido que retirarnos debido a problemas de violencia o desplazamiento. Nos hubiera gustado permanecer, pero las circunstancias nos han obligado a dar un paso atrás en ciertos lugares.
¿Cómo funciona el modelo de franquicias Opticalia?
Nuestra filosofía siempre ha sido emprender junto a los profesionales: optómetras y oftalmólogos que se asocian con nosotros. Les proponemos formar parte de una compañía que los respalda en el crecimiento de sus negocios y que cree firmemente en el cuidado de la salud visual.
Lo nuestro no es una simple franquicia, sino un modelo empresarial flexible, basado en la experiencia en gestión y emprendimiento, que se adapta a las particularidades de cada región. No imponemos reglas uniformes: comprendemos las diferencias territoriales y trabajamos de manera conjunta con cada socio para fortalecer su óptica.
¿En qué consiste ese acompañamiento al profesional?
El respaldo inicia desde la creación del proyecto: buscamos el local adecuado según el potencial del mercado y la visión del profesional. Luego ofrecemos asesoría en diseño interior, montaje comercial y estrategias de mercadeo, especialmente al ingresar a centros comerciales o zonas de alta concurrencia.
Nuestro propósito es proteger la marca, mantener la coherencia visual y dar visibilidad a nuestros aliados frente al público.
¿Cómo está estructurado el negocio para Opticalia?
Operamos en dos frentes principales: por un lado, trabajamos directamente con los asociados, y por otro, con nuestros aliados estratégicos, que son los proveedores de productos y servicios. Opticalia obtiene un margen de intermediación, que representa la fuente principal de ingresos para sostener la operación a nivel nacional.
¿Cómo se comporta el mercado con los proveedores, en especial en el segmento de monturas?
Es un mercado apasionante, con muchos desafíos y oportunidades. Siempre hemos manejado marcas propias y licenciadas, y somos uno de los principales proveedores de nuestros asociados.
Nuestros productos —tanto las monturas propias como las de licencia— se comercializan exclusivamente en ópticas Opticalia.
En Colombia, por ejemplo, contamos con la licencia exclusiva de Arturo Calle, lanzada en 2021. Además, disponemos de un equipo de diseño en España que sigue de cerca las tendencias internacionales, no solo en óptica sino también en moda. Buscamos que nuestras monturas sean más que una solución visual: un accesorio que complemente el estilo y la personalidad de cada cliente.
¿Tienen planes con otras marcas nacionales?
Sí. Continuamente evaluamos nuevas alianzas con marcas locales que combinen identidad colombiana y proyección internacional, tal como lo hacemos en España con firmas como Pull&Bear o MNG. Queremos seguir ampliando nuestro portafolio con propuestas que conecten con el consumidor local.
¿Qué expectativas de crecimiento tienen para el próximo año?
Este año estimamos un crecimiento entre el 3% y el 5% respecto al año anterior.
Como la mayoría de sectores, hemos sentido los efectos de la polarización política y la incertidumbre económica, pero mantenemos una proyección positiva para el siguiente periodo, en el que esperamos un incremento cercano al 10%.
Nuestro reto es continuar ofreciendo un producto esencial —la salud visual— con una propuesta de valor sólida, ajustándonos a las condiciones cambiantes del entorno.
¿El aumento en los costos de energía ha impactado su operación?
Sí, de manera significativa. En regiones como la Costa Caribe, los incrementos han superado lo previsto en nuestros presupuestos.
Aunque realizamos proyecciones a tres, cinco y hasta diez años, cuando los costos de energía o servicios se disparan, es necesario reinventar el modelo de negocio.
En zonas cálidas, por ejemplo, no es posible brindar una experiencia de calidad sin aire acondicionado. Por ello, la estrategia ha sido diversificar e incrementar las fuentes de ingreso, dado que los costos seguirán en aumento.
¿Qué metas de expansión tienen para el próximo año?
Esperamos mantener un balance de unas 10 nuevas franquicias netas, considerando las que ingresan y las que salen, pues así es la naturaleza del negocio.
Vemos grandes oportunidades en Boyacá y Santander, regiones con dinamismo y mercados muy atractivos. Nuestro propósito es seguir consolidando la presencia regional y fortalecer la red nacional.
¿Cómo ha afectado la crisis del sistema de salud a Opticalia?
Tiene un doble efecto. Por un lado, algunos asociados que trabajan con EPS sufren retrasos en los pagos y dificultades de flujo de caja. Pero, al mismo tiempo, ha aumentado la demanda de consultas privadas, ya que muchos pacientes no logran ser atendidos por su entidad de salud.
